Hoy caí en cuenta de que mi perro tiene 16 años y es que no me sorprende por la edad del perro me sorprende porque ese perro ha vivido desde la infancia conmigo, Billy mordió mi juguetes, escondió unos cuantos accesorios de los playmobil en alguna parte de la casa, Billy me vio graduarme de la primaria, la secundaria, la prepa y la universidad, Billy le ladro a mi primer novio, Billy mordió a mis pretendientes, Billy me consoló en mi primer ruptura sentimental y me recibió con un montón e gusto después de mi primer salida al extranjero, Billy me ha corrido del sillón de la tele en numerosas ocasiones, ha roto, descompuesto o ensuciado algo que he tenido que enmendar, me hizo llorar, me ha cuidado cuando estoy enferma, hemos echado la weba juntos, compartido alimentos y hasta bebida, incluyendo las alcohólicas, Billy me ha visto superar todos los retos de la vida y lograr todo lo que me propongo, mi perro es parte de mi familia, y sabe todo sobre mi.
Si algo me han enseñado mi perro Billy es a vivir la famosa frase de Oscar Wilde “Be yourself, because everyone else is already taken”, el siempre ha sido él, si, él así todo un señor, se ha preocupado por ser cascarrabias, posesivo, comelón, mordelón, gritón, sentimental e inexplicable, porque bien sabe que es un miembro más de la familia y que no puede ocupar ningún otro lugar en ninguna parte de la casa mas ese que ya tiene y que bien lo hace.
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